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Odeón de Herodes Ático |
Este año tuve la oportunidad de asistir a unos eventos del festival de Atenas y Epidavro que se realiza cada año en junio y julio, dando un espacio a artistas de todas las clases para que le muestren su trabajo al público. Uno de los lugares que más me llamó la atención fue el Ωδείο Ηρώδου Αττικού (Odeón Herodes Ático).
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Odeón de Herodes Ático |
El día anterior a la obra fui de visita al Akropolis y me encontré con este majestuoso teatro construido en piedra literalmente hace miles de años con los instrumentos y la escenografía lista para su función de la noche siguiente. Durante la visita el audio guía me contaba un montón de catástrofes y hechos históricos sacados de libros de historia de primaria a los cuales uno simplemente dice “wow” y pasa uno a la siguiente lección.
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Odeón de Herodes Ático |
Para llegar me perdí he hice una vuelta del bobo que no se imaginan, pero descubrí un lugar en donde se podía ver el atardecer increíble (no tomé fotos porque como estaba perdida me dio miedo) y ahí me di cuenta que Grecia se caracteriza por sus atardeceres sacados de mis sueños con arreboles (mi Profe de iluminación me dijo que eso era cuando las nubes se coloreaban de naranja y rojo al atardecer). Era hermoso...
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Odeón de Herodes Ático |
Con un mes de anticipación había comprado mi boleta, €15 para quedar en gallinero, pero en ese momento no me importó. La obra inició a penas anocheció cuando el último rayo de luz se escondió. El simple hecho de estar en un lugar sacado de libros y películas, pasado por catástrofes naturales, guerras y cualquier cosa mala que se puedan imaginar y que siga siendo utilizado para su objetivo principal es magnífico. Puede que no haya entendido nada de la presentación, que sólo haya visto hormiguitas moviéndose en el escenario, pero lo que importa es que viví un poco de la historia. Y la moraleja es: ¿Cómo rayos lograron los griegos para que su idea siga a pesar del tiempo? Me les quito el sombrero.
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Odeón de Herodes Ático |